Dirandro buscaba audios de García
Carlos Morán Soto, exjefe de la DIRANDRO |
Por Henry Campos
“Esto explica por qué
desaparecieron los audios de Del Castillo y Garrido Lecca en la suite de
Canaán”, dijo Ponce Feijóo.
El exsegundo jefe de la Dirección AntiDrogas de la Policía (Dirandro), Carlos Morán, reconoció ayer que la investigación policial sobre el caso Business Track (BTR) no solo estuvo orientada a descubrir a los financistas del chuponeo, sino a encontrar a como dé lugar las grabaciones de conversaciones telefónicas del expresidente Alan García.
Fue en un momento del juicio oral en que Morán confirmó la versión del gerente de BTR Manuel Elías Ponce Feijóo de que, en una diligencia de visualización de los materiales informáticos que le habían sido incautados, un oficial anunció repentinamente que se escuchó la voz del expresidenteAlan García, lo que paralizó el procedimiento policial.
El juez Iván Sequeiros le exigió entonces la aclaración respectiva sobre este cuestionable proceder de la Policía debido a que sus pesquisas no estuvieron destinadas a hallar particulares audios sino a descubrir cómo operaban los presuntos chuponeadores y sus financistas.
“Sí, era mi interés (hallar los audios de García) porque era un agraviado potencial, y eso escapaba a los intereses de la Policía por la alta investidura del presidente. El chuponeo habría llegado a altos políticos y sobrepasaba el campo policial”, afirmó.
El procesado Manuel Elías Ponce Feijóo, al término de la audiencia, consideró que lo expresado por Morán demostraría que la Policía actuó en la investigación de este caso a favor de los intereses de los funcionarios de gobierno de García.
“Si buscaban audios de García y de altos políticos es porque había un direccionamiento en las investigaciones y eso explica por qué desaparecieron finalmente los audios de Jorge del Castillo, Garrido Lecca y los otros ministros en la suite de Canaán”, aseveró.
FINANCISTAS
El exjefe de la División de Investigaciones de Dirandro no solo reconoció que conversó informalmente en los calabozos de la Dirandro con Ponce sino también con la exejecutiva de BTR, Giselle Giannotti, quien en un principio habría estado dispuesta a colaborar con la Policía e incluso habría dado información sobre los financistas del chuponeo.
“Giannotti nos dijo que un grupo empresarial del sur, la familia de los Rodríguez Banda, pagaba el chuponeo, y además dijo que BTR no era el único grupo que se dedicaba al chuponeo”, contó. Giannotti le habría proporcionado entonces, según Morán, unos audios de conversaciones de funcionarios de las empresas Otorongo y Laredo para probar su conocimiento sobre el espionaje industrial.
Morán aseguró además que Giannotti le habría confesado que, junto a sus coprocesados Ponce y Carlos Tomasio, apoyó a García en la campaña electoral del 2006.
“Ella contó que le habrían hecho conocer a García que los partidarios de Humala querían detenerlo para que no llegue a tiempo al debate. Eso habría significado que chuponeaban a Ollanta desde el 2006”, afirmó. Pero lamentó que Giannotti a pesar que se le permitió, cuando estuvo detenida, una salida a su casa, no se haya sometido a la colaboración eficaz.